Conducir con una licencia restringida en Estados Unidos implica cumplir con condiciones específicas establecidas por el Departamento de Vehículos Motorizados (DMV) de cada estado.
Este tipo de licencia no es un permiso ordinario, sino un documento regulado que permite a los conductores recuperar gradualmente su derecho a conducir bajo vigilancia estricta, destaca Mundo Deportivo.
Infringir las reglas puede resultar en la suspensión total del privilegio de conducir y sanciones económicas.
Licencias restringidas: disponibles para ciertos grupos
Los menores de 18 años pueden solicitarlas bajo el programa de licencias graduales (GDL), que impone límites de horario, número de pasajeros y radio de circulación hasta que demuestren experiencia y un buen historial.
Los conductores sancionados por DUI, tras cumplir con la suspensión inicial y completar cursos de rehabilitación, también pueden obtener un permiso limitado para desplazarse al trabajo, escuela o tratamientos médicos, generalmente con un dispositivo interlock instalado.
Además, quienes necesiten desplazarse por motivos laborales o médicos pueden solicitar una licencia que les permita hacerlo exclusivamente a esos destinos.
Las restricciones comunes incluyen horarios limitados, trayectos autorizados, restricciones sobre pasajeros menores y un radio geográfico que puede prohibir salir del condado o cruzar a otro estado.
Algunos permisos requieren llevar un localizador GPS o registrar los kilómetros recorridos en línea.
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