Desde el 19 de mayo de 2025, California ha visto el inicio de la Operación Ángel Guardián, una nueva ofensiva contra inmigrantes indocumentados coordinada por el Departamento de Justicia.
Esta iniciativa ha intensificado las tensiones en ciudades santuario como Los Ángeles, donde se han llevado a cabo decenas de detenciones en colaboración con agencias locales.
Según informa Capital, la operación se dirige principalmente a individuos con antecedentes penales o con órdenes de deportación vigentes.
Sin embargo, esto ha generado preocupación entre defensores de derechos humanos sobre sus posibles consecuencias humanitarias.
En solo una semana, el ICE reportó la detención de 239 personas en la región metropolitana de Los Ángeles, abarcando siete condados del sur de California, incluyendo Los Ángeles y Orange.
Argumento de las autoridades
Las autoridades justifican estas acciones como medidas para mejorar la seguridad pública, trabajando en conjunto con agencias como el FBI y el CBP para evitar la liberación de inmigrantes con antecedentes delictivos desde cárceles locales.
Sin embargo, organizaciones civiles advierten que estas operaciones crean un "clima de miedo" que afecta a migrantes sin historial penal.
Para contrarrestar esta situación, varias asociaciones están ofreciendo asesoría legal gratuita y recomendaciones preventivas, como evitar espacios públicos y tener documentos listos en caso de redadas.
María González, vocera del Centro de Recursos para Migrantes en California, ha señalado que el operativo tiene un trasfondo político que pone en riesgo a familias enteras.
Además, el Departamento de Justicia no ha especificado una fecha de finalización para la operación, manteniendo así en estado de alerta a cientos de personas en situación irregular.
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