Donald Trump ha reactivado un tema sensible en el deporte estadounidense. A través de su red Truth Social, el expresidente pidió este domingo que los Washington Commanders y los Cleveland Guardians retomen sus nombres originales: Redskins e Indians. Aseguró que “una gran mayoría” de los pueblos indígenas apoyan ese regreso y criticó que su “herencia y prestigio” estén siendo eliminados.
Ambos equipos modificaron sus nombres entre 2020 y 2022 en medio de un debate nacional sobre racismo y símbolos ofensivos. Sin embargo, los directivos no tienen intención de dar marcha atrás. Josh Harris, dueño de los Commanders desde 2023, ya aseguró que no habrá más cambios. Lo mismo reiteró Chris Antonetti, presidente de operaciones de los Guardians, quien dijo estar “entusiasmado” con el futuro de la nueva marca.
Washington abandonó el nombre de Redskins tras la temporada 2019, pasó por una etapa intermedia como Washington Football Team y en 2022 se convirtió en Commanders. Cleveland, por su parte, dejó atrás el nombre de Indians a finales de 2021, cerrando también el uso progresivo del polémico logo de Chief Wahoo.
La intervención de Trump ha generado una nueva ola de reacciones en redes y medios. Mientras algunos consideran que los nombres anteriores eran ofensivos, otros creen que los cambios han sido excesivos y responden más a la corrección política que al sentir popular.
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