El estado de Texas implementará a partir del 1° de septiembre de 2024 dos nuevas leyes que otorgan mayor autoridad regulatoria a la Junta de Examinadores Médicos Veterinarios de Texas (TBVME).
Las normativas exigen que todas las clínicas veterinarias se registren formalmente y cumplan con estándares específicos de seguridad, sanidad y atención animal, señala EV Houston.
Asimismo, la TBVME también podrá suspender licencias de forma inmediata si determina que un establecimiento representa un riesgo para la salud pública.
Esta medida responde a un aumento en las denuncias relacionadas con políticas internas de clínicas, más que con la actuación individual de veterinarios.
Cambios clave en la regulación
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Registro obligatorio: Todas las instalaciones deberán inscribirse ante la TBVME.
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Mayor fiscalización: Se supervisará el manejo de sustancias controladas, condiciones sanitarias y calidad del servicio.
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Transparencia pública: Los ciudadanos podrán consultar información sobre profesionales, incluyendo quejas y sanciones.
Declaraciones de la TBVME
“Había un aumento en denuncias contra políticas de clínicas, no necesariamente contra veterinarios individuales, pero era difícil asignar responsabilidades. Esto brindará justicia y accountability”, explicó Brittany Sharkey, directora ejecutiva de la TBVME.
La legislación también asigna fondos para modernizar los sistemas de datos de la junta, lo que facilitará el acceso a información relevante para los dueños de mascotas.
“Es un paso crucial para que los texanos tengan paz mental al saber que reciben el mejor cuidado veterinario”, agregó Sharkey.
Contexto y alcance
Texas cuenta con más de 5,000 clínicas veterinarias. Las nuevas leyes buscan prevenir negligencias y establecer un marco uniforme de calidad en un sector que continúa en expansión.
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