La tarta de ricotta es un postre tradicional italiano que combina una textura suave con un sabor delicado y ligeramente dulce. Es ideal para servir en meriendas, reuniones familiares o como postre después de una comida. A continuación, te explico cómo prepararla paso a paso.
Tarta de ricotta
Ingredientes
Masa
250 g de harina de trigo
125 g de mantequilla fría
100 g de azúcar
1 huevo
1 cucharadita de esencia de vainilla
Ralladura de 1 limón
Relleno
500 g de ricotta (bien escurrida)
100 g de azúcar
2 huevos
Ralladura de 1 limón
1 cucharadita de esencia de vainilla
1 cucharada de harina o fécula de maíz
Azúcar glas (opcional, para decorar)
Preparación
- Mezcla la harina, el azúcar y la ralladura de limón.
- Agrega la mantequilla cortada en cubos y une con los dedos hasta obtener una textura arenosa.
- Añade el huevo y la vainilla, y amasa hasta formar una masa homogénea.
- Forma una bola, envuélvela en film y refrigera por 30 minutos.
- En otro bol, mezcla la ricotta con el azúcar.
- Añade los huevos de a uno, batiendo bien después de cada adición.
- Incorpora la ralladura de limón, la vainilla y la cucharada de harina.
- Mezcla hasta obtener una crema suave y sin grumos.
- Precalienta el horno a 180 °C.
- Estira la masa sobre una superficie enharinada y forra con ella un molde de tarta (de unos 22-24 cm de diámetro), previamente enmantecado.
- Vierte el relleno sobre la masa y alisa la superficie.
- Lleva la tarta al horno y hornea durante 40–45 minutos, o hasta que esté dorada y el centro cuaje. Si la superficie se dora demasiado rápido, cúbrela con papel de aluminio.
- Deja enfriar completamente antes de desmoldar.
- Puedes espolvorear azúcar glas por encima antes de servir.
¡Buen provecho!
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