El campeón mundial de boxeo, Saúl "Canelo" Álvarez, es conocido no solo por su destreza en el ring, sino también por su opulento estilo de vida. Una de las propiedades que marcó una época en su trayectoria fue su mansión en San Diego, California, un inmueble de lujo que, a pesar de haber sido vendido en 2015, sigue siendo un referente de su éxito.
Situada en la exclusiva comunidad de Rancho Pacifica, esta residencia fue un claro reflejo del estatus alcanzado por el boxeador gracias a sus victorias y sus inteligentes movimientos empresariales. Aunque Canelo ahora reside en su rancho en Guadalajara, México, la imponente propiedad californiana continúa captando miradas por su magnitud y su valor.
Con una extensión de más de 1.100 metros cuadrados y valuada en aproximadamente 6.4 millones de dólares al momento de su venta, la mansión destacaba por su diseño clásico y elegante. Los techos altos, lámparas de araña y muebles de madera maciza creaban un ambiente de confort y sofisticación, evidenciando el gusto de Álvarez por un estilo atemporal.
La joya de la corona de esta propiedad eran sus seis dormitorios, una biblioteca privada y, sobre todo, las vistas panorámicas al océano Pacífico que ofrecían sus amplios ventanales. La mansión estaba rodeada de exuberante vegetación, con jardines meticulosamente cuidados que realzaban la conexión con la naturaleza.
El "Canelo" decidió vender esta lujosa casa y regresar a México para reencontrarse con sus raíces y estar más cerca de su familia, estableciéndose en un rancho privado en Guadalajara. Este cambio de residencia, aunque significó dejar atrás la opulencia californiana, le proporcionó la paz y privacidad que buscaba para su vida personal y familiar.
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