La esperada pelea entre Khamzat Chimaev y Dricus Du Plessis en el UFC 319 de Chicago no solo acaparó la atención del mundo de las artes marciales mixtas, sino que también se convirtió en un evento lucrativo. La confrontación, una de las más esperadas del año, dejó en las cuentas bancarias de los dos peleadores una ganancia millonaria.
El ganador de la noche, el ruso Khamzat Chimaev, se llevó a casa la bolsa más grande de su carrera. Por su victoria sobre Du Plessis, Chimaev obtuvo un total de 1.8 millones de dólares. Esta cifra es un claro reflejo del éxito del evento, ya que la popularidad del luchador le aseguró una parte importante de las ventas de PPV.
Sin embargo, la verdadera sorpresa llegó con la revelación de la ganancia del perdedor. Pese a la derrota, Dricus Du Plessis se embolsó un total de 3 millones de dólares, una cifra aún más impresionante que la de su oponente. El sudafricano demostró que su estatus en el deporte le asegura un lugar entre las figuras mejor pagadas de la compañía.
Esta disparidad económica revela la compleja estructura de pagos de la UFC, la cual no solo se basa en el resultado de la pelea, sino en la capacidad del luchador para generar un gran espectáculo. En un deporte donde la atracción del público es la clave, el poder de convocatoria se traduce directamente en un cheque más grande.
La era de las ganancias por PPV, sin embargo, está a punto de cambiar. Se espera que a partir de 2026, la UFC se asocie con Paramount, lo que eliminará los PPV y abrirá un nuevo capítulo en las negociaciones de los luchadores para definir sus salarios.
Visite nuestra sección de Deportes.
Mantente informado en nuestros canales de WhatsApp, Telegram y YouTube.